Castillo de Chulilla
De origen musulmán, corona la población conservando restos de torres, puertas y buena parte de su recinto amurallado.
El castillo, de origen musulmán, está ubicado en la cima del monte en cuyas laderas se asienta la población. La fortaleza sufrió diversas reformas. Primero tras la conquista cristiana, después durante las guerras con Castilla del siglo XIV y en los siglos XV y XVI para acomodarlo a uso residencial. El famoso terremoto del siglo XVIII provocó su destrucción, agravada con posterioridad por los conflictos bélicos del XIX.
De su recinto destacan su puerta con matacán almenado, la torre barbacana circular y su prolongada muralla. También se observan restos de salas y construcciones auxiliares, así como de aljibes, uno de éstos de época romana. El castillo contaba con una ermita dedicada a San Miguel.
En distintos puntos del castillo se pueden apreciar grabados de la época medieval: en la entrada, junto al cuerpo de guardia, en una dependencia abovedada situada junto al lienzo de muralla y en la planta inferior del edificio principal.