La fructífera estrategia de defensa de Orihuela
Ante el avance musulmán por la Península Ibérica, Teodomiro, entonces gobernador de la provincia de Orihuela, se refugió en las murallas de la ciudad y disfrazó de soldado a las mujeres, para incrementar la sensación de poder militar ante los árabes que se aprestaban a su conquista.
Los atacantes, viendo la gran cantidad de contingentes que defendía la población, que podía hacer muy costosa su conquista, prefirieron buscar una rendición pacífica en condiciones de vasallaje favorables para Teodomiro, que consiguió el autogobierno de su provincia.